Por: Mtra. Ana Karina Lara Rosales @_karinalara_ 
Apoyo: Perla Lucero Aparicio Nieto @perlaapani
Ilustración: Mtra. Perla Guadalupe Sánchez Leija @perlie_sanchez
Equipo de Educación y Ciudadanía A.C.

Mujeres indígenas: vivencias y procesos de resistencia

Desde 1995, se ha celebrado el día internacional de las poblaciones indígenas, desde la Asamblea General de las Naciones Unidas se decide que cada 9 de agosto[1] se conmemoren a las poblaciones indígenas del mundo. Dicha con-memoración, implica en sí, una memoria de lo que han hecho las poblaciones indígenas en el mundo; considerar estas poblaciones de manera situada, entender sus vivencias con una carga de valores, idiomas y costumbres; más allá del reconocimiento, implicaría un entendimiento de sus prácticas, las cosmovisiones y la manera de coexistir con dichas prácticas.

Además de reconocer las vidas y dinámicas de las comunidades indígenas, también es necesaria una identificación de “los problemas con que se enfrentan las comunidades indígenas en esferas como los derechos humanos, el medio ambiente, el desarrollo, la educación y la salud”[2]. En México, existen diversas poblaciones indígenas que se ven atravesadas por problemáticas que vulneran el ejercicio pleno de sus derechos humanos y derechos colectivos. En algunos casos, han producido movimientos en aras de luchar por sus derechos, principalmente luchas por la tierra y la identidad, reapropiando sus contextos ante lo negado históricamente. [3]

Ante ese contexto, re “memorar” a las poblaciones indígenas en México, significaría colocar las luchas gestadas en los movimientos indígenas, el papel de las mujeres, el despojo dado, las condiciones para su participación política y social, y la serie de violaciones a sus derechos en lo individual y en lo colectivo; algunos de ellos, son: derecho a las formas propias de organización, derecho a los sistemas normativos propios y derecho al acceso colectivo al uso y disfrute de los recursos naturales, entre otros.[4]

Las acciones de los pueblos y comunidades indígenas en México se han visto reflejadas en movimientos, reformas de ley, creación de ventanillas especializadas de atención, creación de institutos, partidas presupuestales especiales, creación de acuerdos intersectoriales, impulso de agendas sociales y gubernamentales, entre otros más. Dichas acciones son esfuerzo colectivo de las comunidades indígenas por el reconocimiento de su existencia en los territorios (“como lugar donde se expresa la vida comunitaria de un pueblo, lugar donde se entreteje lo material, lo espiritual y lo simbólico; de donde se tiene un pasado, se expresa un presente y se construye un futuro […]”)[5], de las formas de concebir el mundo y su pertenencia en él.

Ante un sistema político “determinado”, impulsar acciones de reconocimiento implica una movilización de las estructuras que se ven atravesadas por cuestiones sociales y culturales que no permean otras formas de concebir la pertenencia en los espacios; las comunidades indígenas hacen de su rescate de cultura, una lucha sociopolítica propia y colectiva.[6]

En el caso de las mujeres indígenas, “por la triple opresión que padecen las mujeres indígenas (por ser pobres, por ser indígenas, por ser mujeres)”[7] las luchas se ven atravesadas por una cuestión de su papel de mujer dentro de las comunidades, sus ideales de vida y convivencia en las mismas, limitando en algunos casos, su participación en las luchas sociopolíticas, en otros más, siendo ellas las protagónicas de las mismas; es decir, en todos los procesos las mujeres indígenas llevan a cabo acciones directas o de sostenimiento para la causa.

Desde movimientos en aras de proteger a la naturaleza y sus territorios, hasta luchas políticas de organización, las mujeres se posicionan, colocando el cuerpo en lo individual y en lo colectivo; un cuerpo que también se encuentra en movimiento, que se desplaza a voluntad o por fuerza. Algunos de los  movimientos o desplazamientos de personas indígenas son causados por empobrecimiento, despojo, amenazas, megaproyectos con ocupación de sus tierras, procesos naturales (cambio climático). Es necesario colocar el derecho de las personas indígenas de ocupación y movimiento, de reconocer que existen indígenas migrantes, más allá de un reconocimiento de pertenencia nativa, colocar la existencia de migraciones indígenas con pleno reconocimiento de sus prácticas.

La gestión de las transformaciones sociales en procesos migratorios no puede ignorar, como lo hizo antes, la presencia de las mujeres indígenas en torno a la recuperación y fortalecimiento de sus identidades étnicas y culturales, ni tampoco desestimar la legitimidad de sus reivindicaciones ni despreciar la dinámica de sus estructuras organizativas. El paso de la visión pluricultural a lo multicultural tiene una primera condición fundamental: el diálogo interétnico e intercultural. Las mujeres indígenas han alcanzado un lugar en el escenario y han dicho su palabra; las respuestas institucionales hasta ahora no han establecido el diálogo, porque se procesan como concesiones o reacciones ante la emergencia, desde instancias gubernamentales e institucionales que no son concebidas como interlocutoras.[8]

La con-memoración del día de los pueblos y comunidades indígenas en el mundo, es un espacio de diálogo y acción de las necesidades que atraviesan las personas indígenas; considerar que las sociedades son cambiantes y que imperan nuevas lecturas de retos y necesidades por abordar; reconocer que cada pueblo es distinto, que las necesidades se solventan con base en el diálogo horizontal y de escucha directa con las poblaciones indígenas; reconocer su existencia y pertenencia en cada territorio, así como fortalecer los mecanismos de protección de éstos, especialmente de mujeres y niñas.


[1] De la Torre de Lara, Oscar Arnulfo. [2011], “Tierra y derecho: la disputa …”, op cit.
[2] González Ulloa, Pablo; Rosillo Martínez, Alejandro. [2010], “Los pueblos indígenas en …”, op cit.
[3] Íbidem
[4] Instituto Nacional de las Mujeres. [2007], “Memoria Mujeres afectadas por el fenómeno migratorio en México. Una aproximación desde la perspectiva de género”, México.
[5] CNDH, Día internacional de los pueblos indígenas [2020] Recuperado de: https://www.cndh.org.mx/noticia/dia-internacionaldelospueblosindigenas2020#:~:text=La%20Asamblea%20General%20de%20las,las%20Poblaciones%20Ind%C3%ADgenas%5B1%5D [consultado en 07 de agosto de 2022]
[6]CNDH, Día internacional de los pueblos … op cit.
[7] De la Torre de Lara, Oscar Arnulfo. [2011], “Tierra y derecho: la disputa inmemorial”, Revista redhes, año III, n° 6, julio-diciembre, UASLP.
[8] González Ulloa, Pablo; Rosillo Martínez, Alejandro. [2010], “Los pueblos indígenas en el discurso de los derechos humanos”,México, CENEJUS.

Bibliografía:

CNDH, Día internacional de los pueblos indígenas [2020] Recuperado de: https://www.cndh.org.mx/noticia/dia-internacionaldelospueblosindigenas2020#:~:text=La%20Asamblea%20General%20de%20las,las%20Poblaciones%20Ind%C3%ADgenas%5B1%5D [consultado en 07 de agosto de 2022]
De la Torre de Lara, Oscar Arnulfo. [2011], “Tierra y derecho: la disputa inmemorial”, Revista redhes, año III, n° 6, julio-diciembre, UASLP.
González Ulloa, Pablo; Rosillo Martínez, Alejandro. [2010], “Los pueblos indígenas en el discurso de los derechos humanos”, México, CENEJUS.
Instituto Nacional de las Mujeres. [2007], “Memoria Mujeres afectadas por el fenómeno migratorio en México. Una aproximación desde la perspectiva de género”, México.